El Teatro Español alza el telón con novedades escénicas pero también en su interior
El Teatro Español, uno de los recintos con más solera del panorama escénico de nuestro país, alzó el telón de la nueva temporada el pasado 15 de septiembre con novedades en la cartelera pero también en su interior.
De puertas a dentro se ha realizado una reforma integral de toda la zona administrativa del recinto. Las oficinas han experimentado un lavado de cara completo y el proyecto, llevado a cabo durante el verano, no ha supuesto ningún trastorno para el normal funcionamiento de las representaciones teatrales lo que ha requerido de un importante esfuerzo por parte del equipo humano del Grupo Fulton.
Esta reforma por lo que respecta a la obra civil ha supuesto la instalación de techos modulares, suelos de mármol y paredes con acabado vinílico; en el apartado de carpintería se han ubicado distintas mamparas mientras que el tema de la iluminación está basado en tecnología LED. Además se ha llevado a cabo el sistema de PCi (detección de incendios), la insonorización de las estancias con cerramiento acústico además de la impermeabilización de la cubierta.
El proyecto de climatización ha supuesto instalar en la producción una enfriadora de alta eficiencia y una caldera modular de condensación que sustituyen a los equipos existentes y mejoran la eficiencia a nivel energético. Mientras que en la distribución de agua se proyecta una instalación de caudal variable para optimizar el consumo energético según utilización y ocupación de las instancias.
El Teatro, de estilo neoclásico y capacidad para 760 personas, ha estrenado la temporada 2017-2018 con ‘HOME’, un espectáculo solidario compuesto por 16 monólogos de 5 minutos de duración. La recaudación que se obtenga irá destinada a la ONG Alianza por la Solidaridad, que trabaja con refugiadas sirias en Jordania desde el año 2012.
Este teatro, que llevó por nombre el de la calle en la que está situado, ‘Teatro Príncipe’, cuenta con unas vistas de excepción a la plaza de Santa Ana. En ese mismo lugar estuvo un corral de comedias que se inauguró en 1583 con una representación de Lope de Rueda. Después del 1735 se decidió derribar el Corral del Príncipe, concebido desde este momento como teatro a la italiana.
La historia del recinto está marcada por los tres grandes incendios que ha sufrido. El primero fue en 1802 y arrasó por completo el edificio, quedando en pie solamente la estructura exterior del teatro. El segundo fue en 1975 y entonces se destruyó la totalidad del escenario y una parte del patio de butacas. El último, en 1991 devastó parte del teatro.
En la actualidad, este coliseo, que cuenta en la fachada con seis bustos en honor a Lope de Vega, Tirso de Molina, Ruiz de Alarcón, Calderón de la Barca, Benavente y Lope de Rueda, alberga biblioteca, sala de exposiciones, almacenes y un Café.
Durante sus casi cinco siglos de historia ha inspirado toda clase de historias como los fenómenos paranormales que algunos trabajadores aseguraron vivir en las estancias y entradas. También cuenta con entradas secretas como la de la calle del Prado, entre los números 1 y 3, donde existe una pequeña puerta gris que da acceso a un pasadizo. En realidad se trata de una servidumbre de paso al Teatro Español, de cuando era corral de comedias, que permitía el paso de las damas a su «cazuela» y que más tarde fue utilizado por Godoy, valido de Carlos IV, para asistir discretamente a la sala.