Nueva Sala Blanca en la Fundación IVO
El área de Cleanroom ha vuelto a dejar el sello de Fulton en una nueva instalación. En esta ocasión ha sido en una institución de prestigio como es la Fundación Instituto Valenciano de Oncología, IVO, que ha puesto en marcha una Sala Blanca que garantiza las condiciones óptimas para la elaboración de los medicamentos oncológicos, tanto de calidad como de seguridad, para el paciente y el profesional sanitario.
La nueva instalación dispone de los últimos avances tecnológicos y está a la vanguardia en este tipo de recintos. Ha sido diseñada bajo los más estrictos procedimientos de seguridad y ha adaptado sus instalaciones a las normativas más exigentes de las autoridades reguladoras para minimizar el riesgo de contaminación.
Las instalaciones cuentan con materiales estancos que no permitan ninguna fuga y constan de varios ambientes, absolutamente aislados, para garantizar la esterilidad de la zona de elaboración. La nueva Sala Blanca del IVO está equipada con SAS ‘pasamateriales’,necesarios para el trasvase de productos entre salas de distinta clasificación según la normativa GMP en que se rigen este tipo de salas, dotados con sistema de puertas enclavadas y ventanas estancas, donde se introduce la medicación y se somete a un tratamiento de rayos ultravioleta y ciclos de aire filtrado a través de un filtro HEPA H14, para evitar contaminación biológica y ambiental.
La sala blanca del IVO dispone de una zona específica de preparación y un espacio donde se ubican las dos cabinas de elaboración de quimioterapia que tienen una extracción del aire del 100%, lo que supone una notable mejora respecto a cabinas con recirculación de aire de la sala. Dispone de contadores de partículas en continuo, tanto en ambiente como en las propias cabinas de preparación, que aseguran la clasificación de dichos espacios en todo momento.Cuenta con un espacio de almacenaje clasificado donde se ubican neveras donde se controla y monitoriza la temperatura, para garantizar el perfecto estado de conservación de los fármacos. Existe también un almacén de descartonaje por el que llegan los medicamentos y a través de un SAS de entrada específico de materiales, tras un proceso de descontaminación, pasan al almacén clasificado de la sala.
Otra de las novedades es que la información que reciben los técnicos para la preparación de la medicación se recoge en la sala a través de un ordenador con una pantalla integrada en la propia cabina de producción, por lo que se eliminan los documentos en papel.
La sala está gestionada por un sistema de control automático que permite monitorizar y registrar todos los parámetros de temperatura, humedad, presiones, control de partículas… además de implementar medidas de ahorro energético cuando la sala se encuentra fuera de horario de trabajo, generando un modo de funcionamiento en reposo, siempre manteniendo los niveles de clasificación, que reduce el consumo energético.
Su ubicación, junto al hospital de día, mejora el servicio de atención al paciente. Ahora bien, el hecho de estar en una tercera planta ha dificultado una reforma que ha consistido en la transformación de un espacio equivalente a cuatro habitaciones hospitalarias. Se han instalado ventanas para contar con luz natural en aquellas zonas donde no hay productos fotosensibles lo que permite reducir la sensación de claustrofobia que suele producirse en este tipo de salas de espacio reducido. Dada la importancia de este servicio para un centro monográfico en oncología, el IVO cuenta con un sistema de respaldo con dos cabinas para la elaboración de estos medicamentos,ubicado en otro edificio, que garantiza el suministro de la quimioterapia a los pacientes en caso de cualquier fallo o incidencia. En 2017 la Sala Blanca del IVO gestionó aproximadamente 14.000 prescripciones y realizó más de 20.000 preparaciones de quimioterapia.